
Desde antes del siglo XVI, grupos humanos de Colombia y Venezuela detentaban como gentilicio el nombre, tan conocido en Lara, de Cocuy. Eso es un hecho debidamente documentado. Y posiblemente, casi seguro, que esos pueblos fueron los que, en su desplazamiento histórico, dieron su nombre a diversos lugares de su recorrido.
Se cree que su nombre Cocuy fue sustituido por uno, de origen español, que calificaba mejor su espíritu rebelde, indomable y de tenaz resistencia ante los distintos intentos de las autoridades militares y eclesiásticas para reducirlos a pueblos donde poder ejercer con mayor facilidad su dominio sobre ellos. Los llamaron Coyones (en los documentos aparecen como Cayones, Cuyones, Gallones, Gayones), una palabra del bajo español de significado muy peyorativo aplicado a pícaros y gente de conducta dudosa o deshonesta.